Resumen de la ponencia de Dolores Fernández Fernández, presidenta de la Asociación de
Mujeres Gitanas ‘Romí’ y profesora del centro Almanjáyar-Cartuja (Granada)
La comunidad gitana en España suma actualmente unos 800.000 miembros repartidos por toda su geografía, siendo Andalucía la comunidad que más gitanos alberga. La juventud de esta población (la mitad es menor de 16 años), unida a una tasa de natalidad superior a la media nacional, hacen que sea frecuente contar en las aulas con un gran número de niños y niñas gitanos. No obstante, pese al alto nivel de escolarización, este colectivo cuenta con un importante índice de fracaso escolar y absentismo, especialmente en Secundaria.
El movimiento asociativo gitano lleva años trabajando para romper esta tendencia, extendiendo entre madres y padres la importancia de la educación y de la formación de sus hijos como garantía de futuro. Este trabajo choca, en muchas ocasiones, con la escasa tradición escolar y el apoyo que se presta desde las familias en este ámbito. Algo que se ve atenuado por el carácter cerrado y burocrático de muchos centros, especialmente los de Secundaria, hasta el punto que les resulta difícil llegar a conocer bien su funcionamiento e, incluso, mantener una relación cercana con los profesores.
Uno de los factores que más dificultan la integración del colectivo gitano (familias y alumnos) dentro de la escuela es el choque cultural que se produce. Los niños y niñas no ven en los colegios nada de su cultura o sus costumbres. Es por ello que algunas familias tienen la idea de que mandar a sus hijos y, especialmente, a sus hijas a la escuela pueden alejarlos de los valores gitanos, se pueden “apayar”. A esto se añade que los ritmos y las normas de los centros difieren del carácter activo, alegre y hablador gitano, dificultando en ocasiones la adaptación al silencio y la pasividad de la educación.
Poner en valor las actividades desarrolladas
Desde los centros educativos, tanto familias como docentes y estudiantes dedican tiempo y esfuerzo a organizar actividades o desarrollar programas interesantes. Una labor que no se puede dejar a un lado cuando se está ejecutando una de estas iniciativas es la de ponerla en valor, no tanto de cara al centro como para el resto de la sociedad.
A través de Internet, las redes sociales o mediante los medios de comunicación, resulta positivo hacerse eco de las propias actividades. Esto no supone sólo una satisfacción para los implicados, sino que sirve para que se reconozca la importancia de la actividad y, además, para que las AMPAs ganen peso social y puedan darse ideas entre sí.
La fuerza en el movimiento asociativo es importante de cara a impulsar iniciativas que se recojan desde el plano político.
Por su labor dentro de la comunidad educativa, las AMPAs juegan un importante papel como agente dinamizador de las relaciones entre las familias gitanas y los centros escolares.Para desempeñar esta, en ocasiones, difícil tarea, lo primero que deben tener en cuenta las asociaciones es, precisamente, cuáles son los rasgos culturales de este colectivo.Su sistema de valores, la importancia de la familia o el respeto a los mayores son aspectos a tener en consideración.
El arte gitano, con especial peso del cante y el baile, está muy arraigado en su forma de ser, otorgándoles un carácter muy expresivo. Es por ello que a la hora de plantear actividades o talleres es bueno tener en mente cuestiones como el flamenco, la rumba o la guitarra. Otros de los valores que caracterizan al colectivo gitano son la solidaridad, la hospitalidad, la libertad o mantener la palabra dada.
Conocer y recurrir a la cultura gitana es un valor importante para acercar las familias a la escuela
En este papel mediador, una tarea esencial es la de incentivar la participación de las familias gitanas en la educación de sus hijos e hijas. Para ello, el primer paso está en asesorar a madres y padres en cuestiones que muchos desconocen como puede ser el funcionamiento del colegio, quién es el tutor, para qué sirve una tutoría, cuáles son los objetivos propios del AMPA, para qué existe y en qué les pueden ayudar.
Una fórmula para llegar cada vez a más familias gitanas es buscar su implicación y participación activa en la propia asociación. Contar con ellas a la hora de organizar reuniones,meriendas o celebraciones, para las que se tendrá en cuenta el modo en el que se pueda integrar la cultura gitana (por ejemplo, villancicos gitanos en Navidad). En esta línea, se puede hacer además partícipe al colegio de las festividades típicas gitanas, celebrando el Día Internacional del Pueblo Gitano (8 de abril) o el Día de los Gitanos Andaluces (22 de noviembre), sin olvidar utilizar símbolos como la bandera o el himno.
Además de las ideas apuntadas, cabe remarcar otras estrategias de intervención con la familia, que pueden ser útiles para las asociaciones:
- Tener una información fluida, cercana y frecuente con los padres y madres gitanos.
- Usar un lenguaje adecuado y respetuoso, buscando que sea cercano.
- Facilitar los cauces para la participación, explicándoles los órganos colegio como, por ejemplo, qué es y cómo pueden participar en el Consejo Escolar.
- Demandarles actividades y talleres en los • que estén interesados participar (de guitarra, de caja, de salud, …) Es un buen recurso buscar entre los padres y madres gitanos aquellos que puedan estar interesados o a los que les vendría bien impartir ellos mismos estos talleres, de modo que establezcan como parte integrante de la comunidad educativa.
- Escuchar las demandas-necesidades.
- Apoyarse en las asociaciones gitanas, grupos muy abiertos a colaborar y que pueden facilitar mucho las relaciones con las familias gitanas.
Otro recurso que se puede utilizar son las charlas, dirigidas a gitanos y no gitanos. En ellas se pueden optar por temáticas generales que, por ejemplo, giren entorno a la escuela y su funcionamiento. También se pueden recurrir a organizar conferencias sobre historia y cultura del pueblo gitano, sus símbolos, charlas encaminadas a conocer más en profundidad a gitanos famosos, etc.
No hay comentarios:
Publicar un comentario